Transferencia de grasa

¿Qué es la transferencia de grasa?

 La transferencia de grasa, también conocida como inyección de grasa, injerto de grasa, lipomodelación y transferencia de tejido adiposo, tiene como objetivo aumentar el volumen de una zona específica mediante la transferencia del exceso de grasa del cuerpo del paciente a una zona específica como la cara, debajo de los párpados inferiores, las caderas y las nalgas. La inyección de grasa se realiza con frecuencia y proporciona resultados de aspecto natural a largo plazo que suelen ser permanentes.

¿Por qué se realiza la transferencia de grasa?

La transferencia de grasa permite aumentar el volumen de una zona determinada a través de las células grasas existentes en el cuerpo, sin necesidad de utilizar ningún tipo de implante. Se espera que los resultados de la transferencia de grasa sean a largo plazo, a diferencia del botox y los rellenos, lo que hace que la transferencia de grasa sea preferible a ellos para el tratamiento de los colapsos faciales y las arrugas. La transferencia de grasa es también el tratamiento preferido para ocultar cicatrices quirúrgicas e irregularidades en el contorno corporal.

¿Cuáles son las condiciones para la transferencia de grasa?

La Transferencia de Grasa requiere que se realice inicialmente una Liposucción, por lo que para optar a la Transferencia de Grasa el paciente debe cumplir los requisitos para someterse a una Liposucción. Los requisitos de la Liposucción incluyen los siguientes:

• Poder someterse a anestesia local o general.
• Estar entre 20 y 25 libras (10 kg) del peso ideal del paciente.

¿Qué operaciones incluyen transferencia de grasa?

Algunas operaciones se componen sólo de Transferencia de Grasa y se denominan de forma diferente según la zona objetivo:

• Glúteos: Lifting brasileño de glúteos
• Labios: Aumento de labios
• Senos: Aumento de pecho

La transferencia de grasa también se puede combinar con cualquier otra cirugía estética, pero es más comúnmente combinado con estiramiento facial para rellenar las líneas existentes y pozos en la cara, como el acné profundo y cicatrices.

¿Qué hay que tener en cuenta antes de la transferencia de grasa?

 Antes de la cirugía, a los pacientes se les recomienda lo siguiente:

• El paciente debe estar en el hospital un día antes de su intervención para que se le realicen las pruebas preoperatorias.
• El paciente debe dejar de fumar y consumir alcohol al menos 2 semanas antes de la cirugía para aliviar el riesgo de un coágulo de sangre.
• El paciente debe evitar medicamentos que contengan aspirina o ibuprofeno (Advil, Motrin IB, otros) durante dos semanas antes y después de la cirugía. Estos medicamentos pueden aumentar el riesgo de hemorragia interna. Los pacientes deben confirmar cada medicamento y suplemento que deseen tomar con su Coordinador de Pacientes.
• El paciente debe dejar de tomar suplementos Multivitamínicos 7 días antes de la cirugía, y si contiene vitamina K no debe usarse durante los 30 días siguientes a la cirugía.
• El paciente debe dejar de tomar anticonceptivos orales 30 días antes de la cirugía.

Antes de la intervención, se deciden las zonas donantes y las zonas a transferir para la Transferencia de Grasa, y se realizan los dibujos correspondientes.

¿Cómo se realiza la transferencia de grasa?

 Se administra anestesia general o local y, a continuación, se realizan pequeñas incisiones en la zona donante. La transferencia de grasa se realiza en 3 pasos: Recogida de la grasa, limpieza y transporte, e inserción. Las Células Grasas se extraen con el tipo de Liposucción elegido a través de una pequeña cánula. La grasa extraída se lava, se limpia y se filtra si es necesario. A continuación, se inserta una cánula fina especial en la zona objetivo a través de pequeñas incisiones. Las células grasas se inyectan a través de la cánula en la zona deseada. El proceso se repite hasta conseguir el contorno corporal deseado. Algunos cirujanos recomiendan masajear la zona donde se realiza el procedimiento para obtener resultados más eficaces.

La transferencia de grasa, por término medio, dura de 1 a 4 horas.

¿Qué hay que tener en cuenta después de la transferencia de grasa?

Después de la cirugía, el dolor, la hinchazón y los moretones son de esperar y por lo general desaparecen en unas pocas semanas. Adicionalmente se pueden colocar tubos de drenaje al final de la cirugía para prevenir la acumulación de sangre u otros fluidos corporales. Después de la intervención:

• Se recomienda a los pacientes que reduzcan al mínimo la exposición a la luz solar y al calor, ya que podrían exacerbar la inflamación.
• Se recomienda a los pacientes que eviten la actividad física extenuante durante dos semanas después de la cirugía.

La inflamación puede tardar de 2 a 3 semanas en desaparecer, por lo que los resultados de la cirugía no serán visibles hasta entonces.

Cuando el proceso se realiza con éxito, los resultados suelen ser permanentes sin embargo, algunas zonas pueden necesitar ajustes dependiendo de la demanda o necesidad del paciente.

¿Cuáles son los riesgos de la transferencia de grasa?

 Los riesgos de la transferencia de grasa incluyen, pero no se limitan a los siguientes:

• Acumulación de líquido cerca de la piel, Seroma.
• Hemorragia
• Coágulos de sangre
• Infección
• Hinchazón
• Mala cicatrización de la herida
• Cicatrización
• Cambios en la sensibilidad de la piel
• Daños en nervios, vasos sanguíneos y músculos.
• Reacción adversa a la anestesia.