La vaginoplastia, también llamada cirugía de estrechamiento de la vagina u operación de vaginoplastia, es una cirugía estética vaginal que tiene como objetivo reconstruir, reparar o restaurar la antigua estrechez de una vagina agrandada.
La vagina, que se dilata al máximo durante el parto vaginal, no puede volver completamente a su estado original después del parto. El músculo y el tejido conjuntivo de la vagina resultan gravemente dañados y, debido a la pérdida de elasticidad, se produce un agrandamiento permanente de la vagina. Dependiendo de la gravedad del agrandamiento, la paciente puede tener problemas durante las relaciones sexuales, lo que puede dañar su autoestima, o aumentar la frecuencia de las infecciones vaginales. El agrandamiento de la vagina también puede producirse con la edad. En cualquier caso, la cirugía de estrechamiento de la vagina es la opción preferida. La vaginoplastia también se puede utilizar para reparar cualquier problema congénito que pueda tener la paciente.
La vaginoplastia sólo se recomienda a las siguientes pacientes :
Antes de la cirugía, se recomienda a las pacientes lo siguiente:
El tratamiento de vaginoplastia es único para cada paciente y se planifica como tal.
La vaginoplastia se realiza bajo anestesia general. Después de la intervención se espera un ligero dolor y sangrado. Las pacientes deben tomar la medicación prescrita por el médico. Se recomienda a las pacientes no realizar ejercicios pesados ni nadar durante al menos un mes después de la intervención. Mantener una dieta sana, no fumar y descansar deberían acelerar la cicatrización postoperatoria. Las pacientes pueden empezar a mantener relaciones sexuales al menos 6 semanas después de la intervención.
La vaginoplastia implica cambios en los genitales, que es una de las zonas más sensibles del cuerpo, por lo que los cirujanos actúan con mayor precisión y cuidado al realizar la intervención. Las complicaciones de la Vaginoplastia son raras, algunos de los riesgos son los siguientes: